Evolución del traje de flamenca II: Un alto en el camino para dividir un post que era muy largo, aunque ya estoy de vuelta.
¿Nos quedamos en…? Ah! si, en el año 1955, cuando las señoras y señoritas empezaron a adornar sus trajes con pasa cintas y grandes lazos de raso. Ahora también salen a escena las folclóricas, copleras de la época como Conchita Piquer que se ataviaba con diseños como el veis arriba.
Entran en escena las mangas con volumen y los mantoncillos cruzados en el pecho… Arriba imágenes de 1953 y 1955.
Año 1963
Con la llegada de los años ochenta a la mujer flamenca se le permitió estrechar su talle, destacar los encantos que antes debían permanecer ocultos: por ejemplo pecho y cadera. Fueron los noventa el principio del fin de un modelo de traje ambiguo. Cómodo pero sin ningún sentido estético, que más que embellecer escondía a la mujer detrás de sus volantes.
Seguro que muchas de vosotras estaréis sonriendo ahora mismo, porque todas hemos llevamos en alguna ocasión este tipo de traje. Ahora nos parecen espantosos, pero por aquel entonces eran una maravilla. El modelo de traje de flamenca tal y como lo conocemos hoy en día no llegó hasta principios del 2000.
Querida Elena:
eso de que los vestidos de los 90 nos parezcan ahora espantosos… En mi opinión, a mí me encantan, pero claro yo siempre he ido como he querido.
Actualmente, hay una tendencia a volver a lo antiguo, a lo vintage. Se ven y se compran vestidos de antes, y lo veo en muchos sitios. Creo que es porque sinceramente, aunque tuvieran muchos volantes, eran más divertidos.
Cierto es que, eran muy pesados, y no acentuaban la silueta de la mujer, pero esos vestidos eran para bailar, y usarlos, darles vueltas, moverlos y disfrutar.
Hoy en día los vestidos son más para lucir el tipo, y se baila menos, porque claro, con los de hoy, es casi imposible levantar una pierna, o bailar a la antigua usanza.
En fin, que yo abogo porque cada cual lleve lo que quiera, siempre que se sienta a gusto, consigo misma. Pues en las ferias actuales he visto vestidos de flamenca vintage, no sólo de manga de clavel, sino de otros estilos, y para mi sorpresa, me he quedado de piedra, sobre todo porque pensaba que nadie los llevaba, pero sí. Cada vez más, esa es la tendencia. Volvemos atrás la cabeza por nostalgia. Y no es que sean menos bonitos los de ahora, pero antes considero que se disfrutaban más.
Ahora se lucen esos vestidos vintage, sin importar lo que piensen los demás, porque algunos son realmente bellísimos, tengan cuatro u ocho o diez volantes.
Que no van a la moda! Bueno, sin son felices…
Un abrazo. 😀