Esta feria tú pones las reglas, tú decides cómo llevar el tradicional mantoncillo (en el caso que optes usarlo).
Cierto es que este 2019 hemos asistido al destierro del mantoncillo en pasarela. Han sido muchas firmas las que han prescindido de este tradicional complemento flamenco.
El complemento por antonomasia del traje de flamenca adquiere distinto carácter dependiendo de cómo se coloque. Hoy repasamos las opciones más favorecedoras:
- (1) De forma tradicional: Colocado sobre el cuello, unido en sus extremos al talle. Añade un broche a juego del estilismo y conseguirás un look a temporal.
- Si optas por un mantoncillo hecho a juego de tu vestido, dependiendo del tamaño podrás llevarlo dejado caer sobre el cuello, y sujetarlo más abajo con broche, tendrá un toque muy romántico.
- (2) Hacia atrás: Puedes colocarlo de forma coqueta con las puntas hacia atrás. Si éste lleva algún motivo pintado o bordado destacará sobre trajes neutros y sin estampados.
- (3) ¡Llévalo de forma desenfadada! Déjalo caer a modo de pañuelo, así podrás cruzarlo al cuello o llevarlo suelto, estará sujeto a cómo te sientas en cada momento.
- (4) Marcará tu cintura si añades un cinturón. Una opción muy válida para looks de romería, ¿no creéis?
- (5) Estilo cruzado: El tamaño del mantoncillo os condicionará pero es una forma bonita de no esconder el talle y marcar cintura. ¡Si quieres ser aún más original cruza dos mantoncillos como vimos en Pol Núñez!
- (6) Sobre un hombro. Clásico y siempre de moda.
- (7) Haz que forme parte del vestido.
¡Recuerda que la última palabra la tienes tú!